Seguro que muchos os acordáis de la serie de dibujos animados “Don Quijote de la Mancha”, que estrenó TVE. Corrían los años 80 y fue todo un éxito, gracias a aquella canción tan pegadiza que decía… Sancho, Quijote, Quijote, Sancho… y resumía perfectamente las hazañas del hidalgo y su humilde escudero.
También ayudó el despliegue de merchandising de vinilos, cuentos para colorear y 3 cromos a 2,50 pesetas. Yo lo recuerdo todo muy divertido…
Esta semana como celebramos la semana de los libros y estamos recordando a Cervantes, la hemos rescatado del baúl de los recuerdos. A mi hijo le encanta correr por la casa montado en su caballo imaginario en forma de escoba, como si fuera Don Quijote.
Dicen sus creadores que “todo empezó en Madrid en 1979 como un sueño, una locura, una quijotada”. Fue la primera serie de dibujos animados española y se convirtió en todo un clásico de la televisión, estrenándose en más de 130 países y traduciéndose a más de 30 idiomas. La música fue compuesta por Juan Pardo y Antonio Areta, interpretada por la Orquesta Nacional y RTVE y la canción de la cabecera llegó a ser disco de oro.
La adaptación de la novela estuvo supervisada por la Real Academia de la Lengua y el Instituto Cervantes y se utilizaron más de 2.000 pinturas realizadas en témpera, aerógrafo y pincel para recrear a la perfección no sólo los paisajes manchegos sino también los utensilios, mobiliario y vestuario del siglo de oro español.
Y que decir de los actores que pusieron voz a Don Quijote y Sancho. Los oscarizados Fernando Fernán Gómez y Antonio Ferrandis formaban una entrañable pareja difícil de olvidar…
Por todo esto, la serie de “Don Quijote de la Mancha” es una reliquia digna de desempolvar y una buena forma de que los niños perfeccionen el español y conozcan más acerca de la historia de España y su literatura, de forma entretenida. Podéis ver todos los capítulos y curiosidades en: www.quijote.tv.
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