Hoy los romanos celebraban la Festividad de las Carmentalias, en honor de la diosa Carmenta. Profetisa, protectora de embarazos y partos, patrona de las parteras.
Ella era una de las cuatro ninfas del agua, llamadas Camenae. Las otras tres: Postvorta (diosa del pasado) Anteporta (diosa del futuro) y Egeria (diosa de la sabiduría). Residían en un bosque sagrado de álamos negros, donde siempre era primavera, gracias al agua que surgía del manantial de la Fuente de las Camenas, en el monte Celio.
Para conmemorar el fin de la guerra tras el rapto de las Sabinas, Rómulo estableció para las mujeres esta Festividad de las Carmentalias y lo curioso es que se celebraba en dos días: el 11 de enero, los romanos prohibían a las mujeres pasear en carruaje por la ciudad, para frenar sus lujos, incluso a las embarazadas. En represalia, ellas se negaron a tener hijos y hasta se provocaban abortos. Los senadores, alarmados por el descenso de la natalidad, les restituyeron su derecho y mandaron que se celebraran dos ceremonias en honor de Carmenta, para favorecer los nacimientos. El 15 de enero era el día de la reconciliación. Construyeron un altar en honor de la diosa, donde fue enterrada por su hijo. Todavía quedan restos cerca de la Puerta Carmentalis.
El festival era muy popular entre las embarazadas. Imploraban a Carmenta para que protegiera a sus hijos, a Postvorta para que evitase abortos y facilitase el parto (sobre todo a los que venían del revés) y a Antevorta para que suavizase los dolores del parto.
Los rituales estaban dirigidos por las sacerdotisas y a los cánticos les seguían bailes y procesiones. Las ofrendas eran vegetales, ya que por ser la diosa de los nacimientos, estaban prohibidos los animales muertos, pieles y cueros.
Aunque era una festividad matriarcal, la población se unía a la celebración que duraba hasta el anochecer, pero estaba prohibido tener relaciones sexuales.
A Carmenta también se la considera la inventora del alfabeto latino y del calendario. Sus sacerdotisas eran las encargadas de instruir al pueblo.
Se la representa con un arpa, ya que Carmenta viene de Carmen, que significa canto mágico o poema-verso. En inglés charm “encanto”. De ahí que su nombre se extendiera a pitonisas y adivinas.
Speak Your Mind