Si el COVID-19 está causando estragos dentro de nuestras fronteras, no quiero ni imaginarme lo que puede ocurrir en países subdesarrollados y con sistemas sanitarios mucho más precarios. Por suerte, existen “médicos sin fronteras” que se juegan el tipo en ésta y otras situaciones de emergencia con los más necesitados.
Por este motivo, la agencia Magnum de fotografía, ha puesto a la venta esta semana una selección de más de 120 imágenes creadas por fotógrafos internacionales y artistas visuales.
Si estás pensando en hacer un donativo a alguna ONG, puedes apoyar también al arte, comprando una fotografía de tu fotógrafo favorito al módico precio de $100. El 50% será donado a “Médicos sin Fronteras” para luchar contra el COVID-19. El plazo acaba esta noche, hora americana. Para más info: www.magnumphotos.com/shop.
De cualquier manera, si os gusta la fotografía, os animo a que entréis en su “Diario fotográfico de la pandemia”. Está contado través de las imágenes de distintos fotógrafos y es muy inspirador. Me ha llegado al corazón la fotografía de la cuna vacía de la artista Sim Chi Yin y sus palabras que esperan impacientes y llenas de incertidumbre a que nazca su hijo:
“Querido Lucas: En tres semanas o menos, estarás entre nosotros. En qué mundo caótico estás naciendo… Qué pacífico pareces dentro de mi vientre, ajeno a la locura que ocurre afuera. Haremos todo lo posible para protegerte de lo peor de estos tiempos”. Y pienso… ¡Qué extraño y contradictorio tiene que ser para las madres dar a luz en estos momentos, llenos de inciertas luces y sombras! Sentirse feliz, a medias, porque donde unos mueren, otros nacen. ¿Y quién sabe cómo será el futuro?.
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