Hace unos meses vino a visitarnos un gran amigo (él se define como “Pat, Slim Rider”). A punto estuve de marcharme en su caballo mecánico rumbo a Las Vegas (tenía algunas obligaciones que cumplir, pero lo haré pronto…). No os perdáis las aventuras de este ingenioso hidalgo, una mezcla de Don Quijote y Lucky Luke… Los chicos también sueñan y este es su sueño, así que mejor que lo cuente él:
“Hacer el Costa a Costa en EE.UU. fue siempre uno de mis sueños. Entre todas esas carreteras tan bien reflejadas en el cine, desde “Lolita” a “Thelma y Louise” pasando por “Bonnie & Clyde”, la que ha quedado más fijada en nuestro imaginario es sin duda la Ruta 66, que atraviesa casi todo el país desde Chicago a Los Ángeles, y que siguieron tantos americanos buscando el sueño del oro en California, el Estado Dorado, o sencillamente escapando de la miseria, como nos cuenta Steinbeck en “Las Uvas de la Ira”. Todas esas imágenes de paisajes infinitos, cruces de carreteras, pueblos mineros abandonados y trenes de mercancías alimentaban mi fantasía, y me preguntaba cuanto quedaría de ese mundo…
La web www.historic66.com, me resultó de gran ayuda para planificar mi viaje, además comprobé que podía hacer carambola y empalmando con la Interestatal 95, llegar desde Needles, último pueblo californiano de la Ruta 66, a Las Vegas: un lugar que ejercía en mi un poder de fascinación del tamaño del Campanile, que han copiado a tamaño real del veneciano.
Mi viaje duró tres días, mucha ruta y poco tiempo para visitas, pero creo que eso es una virtud para viajar por EE.UU. e intentar abarcar un país donde todo es “King size”, ya sean camas, hamburguesas o paisajes.
Alquilé la moto en Eaglerider, tenía claro que quería algo bien cómodo y la elegida fue una “Harley Road King” (Elvis estaría orgulloso de mí…).
Salí de Pasadena un martes por la mañana, y una feliz coincidencia quiso que la Ruta 66 atravesase la ciudad, por la Colorado St., así es que con todo empaquetado en las alforjas, empecé mi ruta. Dado que no iba a tener mucho tiempo, decidí no hacer la ruta desde su origen en Santa Mónica, pero los que queráis ser fieles al kilómetro 0, ya sabéis que debéis comenzar desde la costa”. (Continuará… Mañana el primer tramo del viaje).
¡Enhorabuena a este valiente por decidirse a hacer este fantástico viaje!
Y a ti por ir contándonos cómo le va, es genial leer las aventuras on the road, engancha un montón ¡¡Quiero saber más!! 😀
Y gracias por la recomendación de la página http://www.historic66.com, estoy echando un ojo para planearme la mia.
¡Besazos enormes guapa!
P.D. Te queda la moto bien bien bien… 😉
Gracias!
Si, valientes son los que cumplen sus sueños 🙂 y se lanzan a la aventura de vivir.
La segunda entrega en unos minutos…