¿Estás harto del frío invierno? ¿Qué tal una escapada al Caribe? Claudia Ortiz, nos trae otra propuesta interesante para viajar con niños:
El Caribe, por sus agradables temperaturas anuales y la amplia oferta de cosas que ver y hacer, ha pasado a ser uno de los destinos más codiciados, sobre todo para escapadas invernales y Semana Santa, por eso hemos elegido la República Dominicana y algunos consejos para visitarla.
Dónde ir: La República Dominicana ofrece muchos destinos paradisíacos aptos para toda la familia. Uno de ellos es Punta Cana. Playas de ensueño, arquitectura colonial, pescado y marisco fresco y cocinado en parrilla (langosta, centollo, calamar, pulpo) y una vibrante vida nocturna en la que podéis hacer largos paseos en familia disfrutando de las buenas temperaturas. Otro sitio es Puerto Plata, donde practicar todos los deportes acuáticos que te puedas imaginar y hacer una visita turística al Museo del Ámbar, la Fortaleza San Felipe y coger el funicular hasta lo alto del Monte Isabel de Torres. Finalmente, Santo Domingo, una mezcla entre tradición y colonización presente en sus castillos y fortalezas medievales, playas casi vírgenes y un club de salsa merengue para los amantes de los bailes latinos.
Qué alojamiento escoger: Cuando se viaja con niños hay que tener en cuenta que el alojamiento que escojamos tenga una zona recreativa dedicada a los más pequeños y piscinas adecuadas a su edad. Sin embargo, si queréis alejaros de las grandes cadenas hoteleras y preferís que vuestros hijos experimenten un verdadero contacto con el mundo que les va a rodear por unos días, siempre tenéis la opción, mirando en la web o en las páginas de anuncios locales, de alojaros en alguna bonita casa a orillas del mar, con habitaciones separadas, cocina y jardín.
Qué comer: La cocina dominicana está llena de ricos y diferentes platos como el Sancocho (un caldo a base de siete tipos de carne diferentes con auyama, raíces y verduras); el Mangú (un plato servido con huevos fritos o revueltos); el salami dominicano frito y el queso frito; las habichuelas guisadas, servidas con arroz blanco; y el bizcocho dominicano (un pastel suave y esponjoso relleno de piña).
Qué llevar en el botiquín: Aunque es verdad que en la estación seca (nuestro invierno), la cantidad de mosquitos disminuye notablemente y los distintos alojamientos mantienen unas políticas muy estrictas respecto a este tema, siempre es bueno llevar un anti-mosquitos, crema solar de protección alta, gafas de sol (la arena blanca refleja mucho el sol) y una gorra o sombrero. Si queréis saber las condiciones meteorológicas esta es una de las páginas oficiales del país: www.onamet.gov.do.
Con estos sencillos consejos y alguno más, como no alquilar un coche salvo que sea estrictamente necesario, probar los deliciosos zumos de frutas tropicales y estar atento al Jet Lag, sobre todo en los niños, vuestra estancia se convertirá en un viaje a recordar durante muchos años y quien sabe si a repetirlo alguna vez.
C.O.
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