Con motivo del Día de las Niñas, me pidieron colaborar con la campaña de Inspiring Girls, llena de inspiración femenina para niñas y adolescentes. Eso me hizo reflexionar sobre qué les contaría para forjar su camino y su destino…
Nací recién estrenada la democracia, cuando la constitución española y los derechos de los niños colgaban de las paredes de los hogares españoles, allá por los años 70. Entonces no supe apreciar ese momento, pero con el tiempo me sentí afortunada, ya que en muchos lugares del mundo las cosas eran bien diferentes.
Esta niña soy yo de pequeña. No es mi mejor foto, pero le tengo un cariño especial, porque salgo despeinada y mirando a una tierra que para mí significaba Libertad, dentro de mi mundo diminuto. Me conformaba con poco. Correr libre por el campo, observando reptiles e insectos y olisqueando las flores. Tumbarme bajo el cielo, sobre la hierba, soñando entre nubes e inventando historias.
Pero pronto me di cuenta de que en el mundo de los adultos, no todos los “derechos” eran realidades y que se contaban más mentiras que verdades. Creo que fue entonces cuando me volví reivindicativa y defensora de las injusticias y las causas perdidas. Ésta camiseta, con un sol sonriente, era una de mis favoritas. La diseñó una chica para una campaña ecologista.
Por aquel entonces, yo quería cambiar el mundo, pero no sabía cómo. Empecé a contar historias a través de bailes, teatro, canciones y cuentos en el colegio y en el barrio. Después estudié Arte, Publicidad, Diseño Gráfico, Fotografía… Durante mi época universitaria, colaboré con ONGs y realicé talleres de comunicación popular y análisis de medios.
Trabajo en Comunicación desde hace más de veinte años. Hoy, soy Escritora Creativa y sigo contando historias sobre productos, proyectos y personas, con una visión más humana y personal. Colaboro con varias publicaciones como Woman Essentia, con las que intento visibilizar las cosas buenas de la vida y denunciar las que todavía quedan por cambiar. He escrito varios cuentos y un libro sobre “Mujeres que viajan en burro”, que pronto verán la luz. Este blog es mi refugio. El sitio de mi recreo. Un medio independiente, comprometido con los valores, las raíces y los sueños. Un lugar de palabras inventadas y reflexiones reales. Un espacio de empoderamiento femenino.
Viajar y vivir en distintas ciudades me ha hecho cambiar de dirección, de marcha e incluso de camino y destino. Convertirme en madre, luchar por la conciliación. Reinventarme. Observar el camino recorrido me hace coger impulso para seguir avanzando y aprender de los errores. Siempre que he tropezado me he vuelto a levantar, sola o con ayuda, pero cada vez más fuerte.
El tesoro más valioso que guardo en mi interior es esa niña de mirada curiosa y espíritu reivindicativo que espero no perder nunca. A aquella niña de la foto y a todas las demás, les diría: “Sigue plantando semillas. Cuídalas, ponlas al sol… Unas germinarán y otras no, pero siéntete satisfecha, porque habrás ayudado a crear algo útil y bonito”.
La creatividad es fundamental en cualquier aspecto de la vida personal y profesional. Si eliges dedicarte a una profesión creativa, es un camino precioso y muy gratificante, pero también difícil y lleno de altibajos e incertidumbres.
Conócete a tí misma, cultiva tu autoestima y tus habilidades. Persigue tus sueños con ilusión, esfuerzo y constancia. No renuncies a intentar, por miedo o por pereza, aquello que te apasiona. ¡Más vale tarde que nunca!
Viaja, y si no puedes hacerlo, lee cuantos más libros mejor. Fórmate siempre que sea posible, para mejorar o seguir aprendiendo. El mundo está esperando a que aportes tu granito de arena…
P.D. Si conoces a alguna niña o adolescente perdida a la que le puedan ayudar estas palabras, no dudes en compartir 🙂
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