Frutos de septiembre

Paseando por la huerta fotografié las frutas y verduras que todavía podemos comer en septiembre. Ya sabemos que en los supermercados hay de todo el año entero. Es un buen momento para depurar el organismo, con los frutos de temporada que la tierra nos ofrece. Entre las frutas: uvas, melocotones, peras, manzanas, moras e higos. Verduras: calabacines, calabazas, pimientos, berenjenas, coles, acelgas y remolachas.

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La uva es, sin duda, la estrella del mes. Una gran fuente de nutrientes, fibra, vitamina C y antioxidantes (como el resveratrol). Neutraliza los radicales libres y es un gran protector cardiovascular y anticancerígeno. En la piel es donde se encuentra más concentración de antioxidantes y fibra, por lo que es mejor comerlas sin pelar, para evitar el estreñimiento y depurar el organismo. De hecho la piel y las pepitas es lo que mas se utiliza en cosmética para elaborar cremas hidratantes y antiarrugas.

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La pera contiene gran cantidad de agua y potasio, por lo que está muy indicada como depurativo y para evitar la hipertensión. También tiene efecto laxante y es buena para los diabéticos, por su contenido en levulosa.

La manzana tiene pocas calorías, es rica en vitamina C y muy digestiva. La pectina favorece el tránsito intestinal y protege la flora bacteriana. Rallada es un buen remedio contra la diarrea, por su oxidación. Y morderla con piel, muy beneficioso para mantener la boca sana. Ya lo dice el refrán: “An apple a day keeps the doctor away”.

Los melocotones son laxantes y diuréticos. Contienen las tres vitaminas antioxidantes que retrasan el antievejecimiento: A, C y E.

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Los higos tienen un gran aporte energético, son ricos en azúcares naturales y fibra soluble. En cuanto a los minerales contienen potasio, calcio, magnesio, hierro y cobre. También son ricos en vitaminas antioxidantes A y K. y Omega 3 y 6. El filósofo griego Platón los definía como: “El alimento de los atletas por excelencia”. Y es que los deportistas de la antigua Grecia, durante las competiciones de los Juegos Olímpicos, los tomaban deshidratados. Consumidos de esta forma aumentan sus valores nutritivos, por la pérdida de agua. También reducen los calambres musculares, por su alto contenido en potasio y tienen efecto saciante.

Los moras contienen mucha fibra, vitaminas C y E, ácido fólico y hierro. Las antocianinas, responsables de su color morado, protegen la salud cardiovascular y refuerzan el sistema inmune.

Las coles tienen vitaminas B, C y E, ácido fólico y calcio. Y el chucrut que se prepara con el repollo es un probiótico que mejora la flora intestinal. Si le añades comino, ayuda a prevenir los gases.

La remolacha es rica en flavonoides, por la betaína (ese pigmento rojo tan característico). Inhibe y previene la aparición de tumores y contiene mucho hierro, vitamina C y ácido fólico. Es un alimento cardiosaludable, bueno para disminuir el colesterol y la hipertensión. También para depurar el colon y el hígado. Es buena para los deportistas por su aporte energético y el óxido nítrico favorece el desarrollo de los músculos. Como curiosidad, con ella se fabrican tintes, maquillajes y colorantes alimenticios.

El pimiento posee un alto contenido en agua y pocas calorías. Es rico en fibra, enfolatos y antioxidantes. Tiene el triple de vitamina C que la naranja, por lo que es muy bueno para la piel y la vista. Posee capsaicina, de acción antibiótica, analgésica y estimulante de la mucosa gástrica y la vesícula biliar. También es un gran afrodisiaco.

El calabacín tiene pocas calorías y es rico en vitaminas B, C y ácido fólico. Contiene minerales como el potasio, calcio, fósforo, magnesio y manganeso. Es muy bueno para el desarrollo de los huesos de los niños.

La flor del calabacín es una delicatessen, por su dulzor y ternura, pero… ¿sabías que hay dos flores? La flor macho (es la que tiene el tallo fino) y la flor hembra (la que tiene en el tallo un minicalabacín). La flor macho es la encargada de polinizar a la hembra y la que antes se marchita. Ambas son comestibles, pero mejor comerlas nada más cogerlas, porque enseguida se estropean.

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