Sin duda “El Cascanueces” es la representación navideña por excelencia en Los Ángeles. Aunque la primera representación tuvo lugar en 1892 en San Petersburgo, el ballet no se hizo famoso hasta que 50 años más tarde, cuando Walt Disney utilizó parte de la música de Tchaikovski en su película “Fantasía”. A los americanos les gustó tanto que comenzaron a interesarse por el ballet.
Fuimos a ver al Ballet de Los Ángeles al Dolby Theather y realmente es una tradición que se repite año tras año. Los abuelos invitan a sus nietos, que se visten de soldaditos y princesas, bailarinas y muñecas con vestidos de terciopelo para la ocasión. A la salida, nadie olvida llevarse de recuerdo un pequeño “Cascanueces” de madera.
Nos gusta tanto el cuento que lo leemos todas las navidades mientras escuchamos su mágica música. Esta edición de Mary Engelbreit tiene unas ilustraciones preciosas…
Este año hemos adornado la casa con motivos relacionados con el cascanueces y el viejo baúl lo hemos convertido en una caja mágica…
Banderines con bailarinas, el rey de los ratones…
Corazones, estrellas, ratones, cuentos y una bailarina que baila dentro de su bola de nieve una melodía inolvidable…
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